8/5/16

Cuenta atrás

No sé si dejarlo para sentir o sacarlo para entenderlo.
Supongo que es mi suerte, mis maneras de insistir en una respuesta.
¡Oh, amor! ¡Cómo dejarte ir! Cómo hacerlo cuando mis frenos se han cortado con tus palabras. Tan dulces, tiernas y naturales. Qué fácil es ser contigo.
Manos recorriéndolo todo, explorando mi universo. Mis pensamientos encerrados sin sentido. Acallando sentimientos que ni siquiera entiendo.
Todos terminan en risas. Las mías. Mi sonrisa a solas y entre todos.
Qué difícil ser sin ti.

Tan cerca estuvo, tan cerca está. A un sólo paso. Al fin las reglas escritas, las palabras dichas. Mis presiones anta la verdad me dieron las respuestas. Intuir el silencio se olvidó con él, con tus maneras de conocer a los demás y estampar los errores ajenos.
Creo que lo único que llego a comprender es todo lo que no entiendo.
Tantas cosas, todo tan rápido, sin tiempo de pensar. Saco la incomprensión de mis pasos. De mi incredulidad ante la verdad. Porque lo es, una verdad que no es posible. No puede serlo.
No puede ser verdad que detrás de todo haya algo. De nuevo, haya jazmines encerrados esperando a florecer. No puede ser que de nuevo me haya engañado para no sentir. Para no volver a ser quien no puede ser.

No puede ser que a pesar de todo sea feliz. Sonriendo ante una historia que jamás contaré. Mordiéndome el labio con cada nueva conversación. Encerrando situaciones que sólo yo debía recordar. Como aquel beso.
Cosas que debí dejar, cosas que no puedo retomar.
Cosas que sólo me pasan a mí.
Y debo ser yo la que decida.
Irónico.
Tanto poder en tan poca cosa. Tantas ganas amontonadas durante días. Un extraño sentimiento de añoranza. Un corazón palpitando al unísono.
Alguien dispuesto a saltar con una mano escondida.
Y sigo sin llorar.
Sigo con mis manos sobre la nieve y con mis ojos perdidos entre tanto negro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario