25/1/18

Luz artificial

Mi juventud perdida con demasiados años en el alma 
y sin una llave para abrir mis puertas.
El paraíso perdido, la felicidad que desgarra.
Yo busco mis deseos, pero es el miedo quien me agarra.
Hoy no me siento brillar, el sol oscurece mis lágrimas.

El corazón de las estrellas, estrellas que brillan, no como la mía 
que se apagó por pereza.

Mi corazón no entiende de penas, no entiende de ganas, 
ni entiende de prisas, sólo entiende de letras.
Pero mi cuerpo, mi sangre y mis penas me dicen levántate 
porque las cosas se están poniendo feas.

...

Que van tocando palmas y se va llenando de flores.

Las etiquetas se marchan. Yo les pongo sonidos, les pongo sentido y a tus fantasmas que se los lleve el demonio. Que yo por ti, no sigo.

21/1/18

Sorpresas

Uno más en la familia.
Me sentía fuera, apartada con una familia a la que visitas por navidades. 
Con una única comunicación a través de billetes.
Con notas y sin hogar.
Pero ahora viene uno más. La sonrisa aparece, estúpida y sin sentido.
Me vino a la mente una Nochebuena con un carrito de bebé.
Con mi abuelo sonriendo ante su bisnieto.
No pensaba en su dependencia, en sus cuidados o destrozos.
Sólo pensaba en abrazarlo, en tenerlo entre mis brazos.
En observarlo y darle calor.
Quería tenerlo ya, besarlo, cuidarlo y sonreírle.
Darle mis consejos aunque no los comprendiera.
Pensé en que ser madre quizá no tuviera tantas complicaciones.

18/1/18

¿Quién eres?

Tenerte cerca en cada paso, mirar tus ojos, recibir un abrazo.
Esos ojos que ven más allá.
Que se quedan mirando, buscando en mi interior oscuro.
Me matan esas miradas. Esa sonrisa que siempre te acompaña.
Y esos besos que me abrasan.
Este amor maldito que me quema por dentro. Me pide más, pero sólo añoro tus besos.

Te veo de su brazo y recuerdo. No eres mía, nunca lo serás.
Pero mi corazón me pide seguir, mi corazón se alimenta de esos besos tan efímeros e inoportunos (imperativos).
Se alimenta de tu presencia y de tu belleza.

De esos labios que calman mi sed. Mi sed de ti.
De tenerte, de poseerte.
De hacerte feliz.
Te quiero tanto.

Te deseo lejos para no pensar más en ti.
Para no llorar por este amor imposible.
Te necesito lejos y te necesito cerca.

Cada segundo a tu lado es un día más de añoranza. De desesperación.
De ganas de morir por este sueño imposible.
Y no puedo más. Ya no puedo más.

Tengo envidia de un fantasma, siento celos de un gallito.
Ni animales, ni muertos.
Sólo queda dolor y sufrimiento. Rechazo silencioso y miradas que perduran.

Si tú quisieras sería tuya. Sin sensatez ni delirio.
El amor me impone este castigo.
Porque el amor es el amor.