19/2/18

Y aquí de nuevo

Frente al folio y escribiendo un no sé qué.
Destruída hasta encontrarme, pero con una herida que no logro cerrar. Buscando mi futuro, creyendo en mis proyectos y escuchando una música de unos cascos ajenos.

Sonrío. De nuevo sonrío, escuchando quejas de alguien perdido. A sabiendas de que esa gran herida que está por sanar no pudo conmigo. Con estas estúpidas ganas de mandar besos curativos.

Sé lo que quiero, pero no sé cómo hacerlo. Nunca lo he sabido y después de perderme entre tanto dolor sigo sin saber cómo hacer las cosas bien. Pero sé a quién quiero a mi lado y a quién no. Sé que mi familia es eso que anhelo entre tanta soledad, entre tanto desorden y entre tantas ganas de avanzar y ser feliz.

Ya no me voy a conformar con una felicidad hecha para mediocres, con una mentira llena de verdad. Yo soy quien soy y quien quiero ser. Ya no voy a callar mis incomodidades, ya no voy a aguantar por nadie, nada más que por mí. Se acabó mi sonrisa creíble, mis buenos modos y mis manos abiertas.

Mi camino es lo que construyo y quien sea incapaz de levantar un ladrillo es polvo sobrante de un nuevo piso.


No hay comentarios:

Publicar un comentario